jueves, 5 de diciembre de 2013

¿Qué esperar de los escarabajos en el 2014? (Tercera Parte)

(Por Alvaro Tovar)

(Leer la Primera Parte: Urán)

(Leer la Segunda Parte: Betancur, Atapuma, Serpa, Anacona) 

En este artículo continuamos con el análisis de lo que podría depararnos en el 2014 a nuestros corredores World Tour y a los dos líderes del Team Colombia.


CAYETANO SARMIENTO
EQUIPO CANNONDALE

Cayetano había generado una expectativa mayor. Se esperaba de él una temporada 2013 mejor que la realizada. No estuvo mal al límite. Pero escasamente cumplió. Hizo un trabajo al servicio de Ivan Basso, al que seguramente ayudó en lo justo: sin menos pero tampoco sin más. Un trabajo algo descolorido; una actuación sin ribetes de esperanza. Un 2013 que deja más dudas que sueños sobre sus reales capacidades y su verdadero potencial. Hubo quienes incluso pensamos que su puesto en el WT estaba en peligro, lo cual afortunadamente para él y para nuestro ciclismo no pasó. 

En este marco, la pregunta es ¿y el 2014? Confío en que vaya a más; creo que por lo mostrado antes del presente año, se puede esperar un desempeño mejor de Cayetano: ganar algunas etapas; estar más arriba en las generales finales del Giro o de la Vuelta, en las que seguramente va a estar presente. Si su temporada vuelve a ser gris, como la actualmente finalizada, habrá dado el paso decisivo para perder su presencia en lo más alto del ciclismo mundial.


SERGIO LUIS HENAO
EQUIPO SKY

Sergio Luis es una de las cartas básicas para jugar por nuestro ciclismo en el año 2014. No obstante, el año que acaba de concluir ciclísticamente no terminó siendo bueno para este paisa. Un buen comienzo hasta antes del Giro de Italia y luego un descenso en su rendimiento, del cual no pudo salir. 

Tuvo la oportunidad de liderar el SKY en la Vuelta a España y no pudo responder a esa confianza. Pudo ser la oportunidad de su vida para demostrar que tiene galones de líder pero por la razón que fuese no la aprovechó. Ahora tendrá pocas libertades. Estará supeditado a trabajarle a Froome y a Richard Porte, este último quien asume claramente el papel de segundo hombre de su equipo para las grandes vueltas. 

Muchos aficionados quedamos con el deseo frustrado de ver a Henao en franca progresión a partir de ese buen Giro que realizó en el 2012 y creemos aún que es posible que dicho ascenso en el rendimiento se produzca. Pero también hay un temor: que se estanque. Que el Henao del Giro 2013 y subsiguientes sea nuevamente el Henao del presente año. Es una de las incógnitas de la nueva temporada.

Personalmente tengo algún temor. Recuerdo que cuando corría en Colombia, demostró ser un buen corredor, pero no un fuera de serie. Hubo etapas en Colombia en las que aflojó ante rivales que se pueden considerar de talento y condiciones inferiores. Por eso, cuando él se adaptó de manera tan brillante al ciclismo europeo dando resultados muy buenos yo me sorprendí –y muchos quizás- porque sus antecedentes no daban para llegar tan alto tan rápidamente. ¿Será que estamos ante un río cuyas aguas vuelven a su cauce después de haberse desbordado por un exceso de caudal momentáneo simplemente episódico? Esperemos que no. En todo caso, lo veo de nuevo animando los finales de clásicas y etapas donde los muros y el terreno escabroso estén presentes, orografía a la cual se adapta perfectamente. Y en las grandes Vueltas dando las dos manos a sus jefes de filas. 


SEBASTÍAN HENAO
EQUIPO SKY

Talento puro parece ser este veinteañero, que a tan temprana edad llega a las ligas mayores del ciclismo mundial. Excelente Vuelta a Colombia la que realizó en este año en el que debutó en la máxima carrera de nuestro ciclismo. Una Vuelta dura, para grandes fondistas, en la que demostró ser el mejor prospecto de su edad, por encima de Daniel Jaramillo, de quien se pensaba que era el candidato más firme para llegar antes que Sebastián Henao al WT. Pero en los dos tests definitivos para juzgar la calidad de cara a Europa: Vuelta y Mundial, Henao demostró estar por encima de su coterráneo, a pesar de que en la Vuelta de la Juventud Jaramillo lo haya superado. 

Pero aquellas dos pruebas tan exigentes, que piden fondo, resistencia, cambios de ritmo, ubicación, adaptación al sufrimiento, en esas dos, Henao pasó los exámenes con superior por lo cual adquirió el derecho de llegar a un equipo de primerísimo nivel, donde iniciará su proceso de aprendizaje, que por lo visto –pienso- va a ser rápido. Con este no va a pasar como pasó con Argiro Ospina. No, Sebastián nos dará satisfacciones más temprano que tarde y demostrará el acierto que se tuvo por todas las partes implicadas en haberlo vinculado al ciclismo del máximo nivel. A seguirlo con mucha atención en las carreras en las que su equipo tendrá a bien inscribirlo para que inicie su proceso de adaptación al ciclismo europeo.


NAIRO QUINTANA
EQUIPO MOVISTAR

Y aquí estamos ante la joya de la corona: Nairo, el sorprendente Nairo. Segundo del Tour de Francia en su primera participación, campeón de la montaña, campeón joven y ganador de una de las etapas reinas de la Gran Boucle. Ganador además de la Vuelta al Pais Vasco y de la Vuelta a Burgos. Y con sólo 23 años. Chapeau, simplemente. ¡Admirable! De un momento a otro convertido en un figurón. ¿Y ahora? 

He ahí el reto, he ahí la presión. No es fácil pasar de segundo a primero; es más fácil lo contrario: descender, pasar de segundo a tercero y de ahí hacia abajo, y si este fuese el caso aquellos que lo han aplaudido y que esperan ansiosamente esos primeros lugares saldrían entonces a desconocer y a olvidar lo hecho, en el mejor de los casos, o lo peor, a criticar ácidamente lo que valorarían como un fracaso del que antes consideraban un héroe. Sobre todo en nuestro medio latino. Por eso a Quintana se le viene un reto difícil: seguir en el nivel mostrado, cuanto menos. 

De correr el Tour, todos esperaremos verlo en el mismo nivel, si no mejor, que en el mostrado en el presente año. Es decir, esperamos verlo en la disputa del título, tú a tú, con Froome, con Nibali, con Contador. Y si no está en el Tour, o si está, pero no en la misma condición mostrada en este año, entonces quisiéramos verlo ganando el Giro o la Vuelta. 

Precisamente, esto es lo que puede pasar: Quintana centraría su objetivo central del año en el Giro de Italia, una carrera que por su recorrido le viene como anillo al dedo. Una carrera en la que bien podría alzarse con dos etapas, por lo menos, y con el título final, con lo cual pondría el listón al mismo nivel- si no más alto- del que lo puso en la presente temporada. Con esto, lograría pasar de nuevo el año con sobresaliente, independientemente de lo que pase en el resto de temporada, que si fuese bueno o muy bueno ya sería un plus de excepcionalidad que lo elevaría a un rango todavía más alto, en el que comenzaría a tejerse una historia de leyenda, de mito. Por tanto, parece claro el calendario de Nairo: todo centrado en el Giro. 

Difícilmente, puede haber un mejor recorrido para él. Si así lo comprende su entorno y él mismo, y planifica su temporada 2014 en torno a éste como objetivo central podemos contar con otra brillante temporada del nacido en Cómbita. Un Giro es una estrella perenne en el historial de cualquier ciclista y el de este año parece estar muy cerca de su palmarés. ¿Y el Tour? Pues ya habrá tiempo. Lo más seguro es que si hace Giro a tope no vaya al Tour, y luego de una readapatación de su curva de rendimiento lo encontremos en la Vuelta a España, animándola seguramente, por qué no disputándola, y ganando por lo menos una etapa. Y también por supuesto en el Mundial, cuyo recorrido también le es favorable. 

Ahora bien, si así fuesen las cosas, ¿cuál sería ese calendario de cara al Giro? ¿Tour de Sal Luis, Tirreno-Adriatico, Vuelta al Pais Vasco, Giro del Trentino, Tour de Romandie? Podría ser. De cara al Giro, hay que comenzar temprano el rodaje y apuntalar la forma pronto para estar a tope en el mes de mayo. Se debe también correr en Italia para familiarizarse con el ambiente, con la topografía y con buena parte de los rivales. Por estos días en que aparece esta nota se debe conocer la columna vertebral del calendario de Nairo, que despejará incógnitas de hacia donde él y su equipo dirigen sus objetivos. Creo que no se equivocarán y harán público lo que el sentido común indica: prioridad Giro de Italia. Objetivo: ganar la corsa rosa y abrir un palmarés de triunfos en las grandes pruebas por etapas con la segunda de las tres legendarias, con la más romántica y apasionada, con el increíble y muy duro Giro de Italia. 

Enhorabuena pues, y fuerza por nuestro gran Nairo, que ad portas está de otro gran año, y si acaso no fuese, y los hados no estuviesen de su lado en algún momento, no olvidemos su clase, su potencial, y mantengamos la fe en el gran futuro que le espera.